El Rol del Agente Aduanal en la Era de la "Aduana Inteligente": ¿Auxiliar o Co-responsable?

Por el equipo de Horizonte Aduanal | 13 de octubre de 2025

La reforma a la Ley Aduanera ha redefinido la figura del agente y la agencia aduanal en México, pasando de ser simples «auxiliares» del Estado a convertirse en co-responsables solidarios de las operaciones de comercio exterior. Este cambio no es menor; representa una reestructuración fundamental del modelo de negocio y eleva la exigencia de profesionalismo y diligencia a niveles sin precedentes.

La «aduana inteligente» que se está construyendo en México requiere que los agentes aduanales se adapten rápidamente a las nuevas obligaciones:

  • Certificación y Control: La patente vitalicia ha desaparecido, y ahora se exige una certificación obligatoria cada dos años, así como la obligación de mantener un expediente exhaustivo con la información de los importadores y exportadores. Esto impone una carga administrativa considerable y un escrutinio constante.

  • Responsabilidad Ampliada: La nueva ley establece que los agentes aduanales serán responsables al 100% de la correcta determinación y pago de las contribuciones. Esto ha generado preocupación en el gremio, ya que podrían ser sancionados por errores o información falsa proporcionada por terceros, lo que ha llevado a algunos a considerar la posibilidad de rechazar operaciones de alto riesgo.

  • Digitalización y Tecnología: La modernización aduanera exige a los agentes aduanales una inversión en tecnología para garantizar la trazabilidad digital de las mercancías, la interoperabilidad con la ANAM y la implementación de herramientas de inteligencia artificial para la gestión de riesgos.

En este nuevo contexto, el agente aduanal debe transformarse en un estratega y asesor integral para sus clientes. Más allá de simplemente tramitar documentos, su papel ahora es asegurar el cumplimiento normativo en cada etapa de la cadena logística, lo que lo convierte en un socio indispensable para las empresas que buscan navegar el complejo entorno del comercio exterior en México. La profesionalización y la transparencia serán, más que nunca, las claves del éxito.